RECTA FINAL, ELECCIONES - BOLIVIA

La campaña electoral en Bolivia, llega a su recta final.
La conclusión, pobre, demasiado pobre en contenido, propuestas y programas.
La falta de nuevos liderazgos, es notoria.
El partido en función de gobierno el “MAS”, cuyo líder Evo Morales A, actual primer mandatario de la nación, fue quizás el único con algún nivel de campaña electoral estructurada..
Inicialmente polarizo, fortaleciendo a un candidato, situado en el extremo opuesto, esta candidatura, acepto el reto, con ello limito sus posibilidades de crecimiento, en masa electoral.
En una segunda etapa, planteo una estrategia de guerra sucia, dirigida en contra del candidato del centro, que podría tener la oportunidad de captar votación de ambos extremos, con un simple programa de entrevista televisiva al candidato, una cuña de propaganda, logro el objetivo, confrontar el mensaje de campaña, orientada a fortalecer la micro-empresa.
El punto débil del caballo del corregidor, fue cubierto mediante exhaustiva campaña institucional, por diferentes reparticiones de gobierno, tergiversando los fracasos de gestión, presentándolos como éxitos primarios, prometiendo nuevos emprendimientos, como, si cuatro años de mala gestión administrativa, fuese únicamente un curso preparatorio.
Ya habíamos adelantado criterio, la falta de cintura, de habilidad política, de los candidatos de oposición es algo lamentable.
Conocíamos que sería una campaña asimétrica.
Los medios de comunicación engolosinados con sorprendentes revelaciones de terror, macabros manejos políticos, en los que altas autoridades de gobierno, se encuentran seriamente involucrados.
El tema, planteado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos con sede en Washington , D.C., por la Presidencia del Senado Nacional, mereció inmediata respuesta descalificadora, por parte de las autoridades en función de gobierno, parece que les preocupa que la imagen del “Yo supremo” se encuentre deteriorada internacionalmente .
Bolivia, en el contexto internacional, no es Venezuela.
Que, esperar en estos comicios, el panorama aun incierto, al parecer el nivel de popularidad del Sr. Evo Morales, sufrió una caída considerable, aunque ningún candidato opositor supo ganar para si ese caudal electoral.
El partido oficialista en términos políticos “pateo el tablero” al punto que a la clase media, a la población citadina, la saturo de política, queda entonces la incógnita del comportamiento de aquellos electores.
Al parecer el éxito del nuevo padrón electoral, con características biométricas, fue solo la percepción de la conciencia democrática del boliviano, hoy por hoy, nadie puede asumir su representatividad.
La Corte Nacional Electoral, amedrentada en su primer intento de tratar de hacer cumplir el mandato de la Ley, esperemos que logre llevar el proceso a buen término, lo que se ve en el horizonte es la descalificación inmediata de cualquier resultado.
Lograron el objetivo primario, que es la victimización, ahí el partido en función de gobierno tiene las de ganar, dos mensajes claros.
El primero, cuestionar las denuncias internacionales, por falta de respeto a los derechos humanos elementales, el argumento simple, porque tienen que acudir a la capital del imperio para denunciar estos atropellos, como si aquella ciudad no fuese sede de la Organización de Estados Americanos.
El segundo, anuncios de intereses de un país vecino, en anexarse la ciudad de Santa Cruz, tan descabellados, que no contemplan la posibilidad de continuidad geográfica, maniobras, conocidas, de amplio manejo en la sede del eje bolivariano, Caracas – Venezuela.
La acostumbrada viveza criolla, manipulación y manipulación al mejor estilo de la época colonial con el “Acátese no se cumpla”.
El imperio de la ley es válido solo para las fuerzas de oposición, las del oficialismo, solo las acatan cuando conviene a sus intereses primarios.
Por René Ichazo paz