WHIPALA , NUEVA ENSEÑA PATRIA - BOLIVIA

El Fascismo, es una doctrina política del siglo XX, basada en la exaltación nacionalista, el desprecio al espíritu democrático, la implantación de un régimen dictatorial, la exaltación del Estado y menosprecio al individuo, necesidad de la dirección personal y dictatorial del jefe, de la obediencia ciega a este, próximo al Fascismo, se encuentran el Nacional-Socialismo, la Falange Española, lo Ustachis Croatas, la Guardia de Hierro Rumana,Etc.
Su práctica de construir Estado se basa en la generación de supremacía, concentración de todo el poder, disolución de los demás partidos políticos, creación de una policía política, eliminación del parlamentarismo, la exaltación del pasado, la entronización de un caudillo.
No se nos hacen muy conocidas estas definiciones, en el accionar actual del Primer Mandatario.
Escuche, con estupor, unas declaraciones de Evo Morales en alguna concentración popular, en las que llama la atención a sus bases y expresa textualmente “O somos Masistas o Fascistas”, creo que el contenido de esta declaración, no es un dislate, es un sinónimo.
Una de sus características básicas, es generar simbologías de poder, con el propósito de anular las anteriores, tal el caso de las Camisas Negras, en Italia, el Águila Imperial y la Cruz Esvástica, en Alemania.
Recientemente, vimos una corriente de crear nuevas Constituciones Políticas del Estado en todos los gobiernos del eje, Venezolano, que incluyen entre otros adornos el cambio de nombre de la república.
En Bolivia, se fue, un paso adelante, nos impusieron un nuevo símbolo patrio, la Whipala, en representación a los pueblos indígenas, extraña política, porque, de originaria no tiene nada, ese símbolo existía en Flandes, y quizás fue traído a estas tierras por los conquistadores, gracias a los cuales el mundo, tiene una deuda moral, con Bolivia por 500 años de explotación.
Lo afirman con toda seriedad, como si creyesen ese cuento.
Algo simpático respecto a este nuevo símbolo patrio, en la ciudad de La Paz, existió un personaje, digno de mi mayor respeto, el cual excepcionalmente recibió los honores que le correspondían en vida, el reconocimiento a su dedicación, esfuerzo y patriotismo, me refiero a ex Alcalde Municipal Dn. Gastón Velasco, muchos lo conocerán mas, porque, fue propietario de una industria BBB (Bueno, Bonito y Barato) dedicado a la producción y comercialización de cotillón, mixturas y serpentinas.
Además de ser un historiador dedicado, su vida, fue definida a la causa marítima, un estudioso de la infausta guerra del pacifico, coleccionista de mapas, banderas, y todo objeto de esta campaña, colección que entiendo, fue donada a un museo a expreso deseo.
Tuve el placer de conocerlo, de mantener conversaciones amenas e ilustrativas con él, tal era su pasión que contagio mi espíritu.
En Radio Panamericana, uno de sus allegados escucho una entrevista con un campesino, que narro al locutor que Dn. Gastón, solía llevar en sus viajes estas banderitas y obsequiarlas, en por el altiplano Boliviano, viajes realizados, casualmente por el tipo de comercio al que dedico, gran parte de su vida, la venta de cotillón, serpentinas y mixturas de papel de colores, infaltables en cualquier festejo.
Alguna vez escuche de el, este comentario, no le preste mayor importancia al tema, porque en esos momentos, era absurdo pensar que nuestro emblema patrio, la bandera tricolor, pudiese ser suplantada, por la huipala.
Hasta el nombre le cambiaron ahora es Whipala, para darle, una cacofonía de origen aymara.
Bueno, la hija de Dn. Gastón, Isabel, me comento hace un par de días que la idea y el diseño nace de la etiqueta de un botella de agua carbonatada de sifón, que solía, impresionar a los campesinos.
Falacias, falacias y más falacias, de ancestral y originario nada.
Por: Rene Ichazo Paz